viernes, 23 de noviembre de 2007

QUE JALADA

Catedral sólo había cerrado sus puertas una vez, durante la guerra cristera, luego de eso, ni las remodelaciones que duraron cinco años, ni ningún otro suceso había hecho que sucediera.
Yo no soy partidario del “peje”, y su “gobierno legitimo” me parece más la puesta en escena de un egomaniaco que otra cosa, pero que durante el discurso de uno de sus allegados Catedral haya sonado sus campanas por más de 20 minutos me parece, si no una provocación, sí una clara muestra de la iglesia por dejar ver a quien apoya (recordemos, que la iglesia no tiene porque meterse en política).
Catedral se hace la víctima (tal vez si lo sea, pero exagera el asunto), se desgarra las vestiduras y cierra sus puertas (que ojalá no se abrieran nunca más) gritando a los cuatro vientos que es sacrilegio, que es daño a la propiedad privada, que es interrupción de culto y no sé que más y el gobierno le sigue el juego mandando a la policía bancaria y a no recuerdo que otro grupo policiaco. Algo muy risible, es que pidan que no mezclen a la iglesia en la política, cuando ellos (Iglesia católica, Norberto Rivera a quien le gritaron pederasta y curiosamente ningún medio lo dice) no hace más que meter su cuchara en la política nacional.
Una pregunta que debemos hacernos es: si en lugar de catedral hubiera sido un templo cristiano, mormón, una mezquita, etc. ¿Los medios darían tanta importancia? ¿El gobierno habría puesto sus más de cien elementos a resguardarlo? Yo, honestamente, no lo creo.

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